(3) Eres el Resultado de Ti Mismo

ERES EL RESULTADO DE TI MISMO

     Recién comenzado este año 2011, mi esposa me comentó sobre una lectura que había hecho a una vieja impresión de un correo electrónico que le había entregado una compañera de trabajo hace ya unos 10 años, y que esa lectura le había causado una revelación mística, sensorial, electrizante en el cuerpo, más que cuando su amiga se lo había regalado en aquel momento. Y me hizo hincapié, que ese correo tenía en este momento de nuestras vidas, más vigencia que nunca, y me lo entregó para que Yo lo leyera, pero me hizo igualmente la salvedad, que lo hiciera a solas y en un momento de relax y concentración, donde nada me perturbara la lectura. En realidad a medida que lo fui leyendo, la mente se me fue llenando de revelaciones y conclusiones determinantes, que la decisión de escribir este Blog, es, además de otras decisiones que tomé y que voy a tomar, consecuencias de esta lectura tan reveladora y contundente.

     No sabemos a ciencia cierta quién es el autor de este revelador escrito (o sentencias, más bien), ni cual es su origen, pero lo que si sabemos es que cuando Uds lo lean, y si están pasando por una situación difícil, lo van a leer con un detenimiento acertado. Aquí les regalo este escrito:

     No culpes a Nadie de nada, Nunca te quejes ni de nada ni de nadie, porque fundamentalmente, Tú haz hecho Tú Vida y nadie más te ha puesto en esta Situación.

     Acepta la responsabilidad de edificarte a Ti Mismo, y ten el Valor de Acusarte en el Fracaso para volver a empezar, corrigiéndote.

     Nunca te quejes del ambiente o de quienes te rodean, Hay quienes en Tú misma situación (o peor) supieron vencer.  

     Las circunstancias son buenas o malas según la Voluntad o la Fuerza de Tú Corazón: Aprende a convertir toda situación difícil en un Arma para Luchar.

     No te quejes de Tú pobreza, de Tú soledad, o de Tú suerte, enfréntate con Valor y Acepta, que de una u otra manera, son el resultado de Tus Actos, y al mismo tiempo la Motivación para Triunfar.

     No te amargues de Tú propio Fracaso, ni se lo cargues a otro, Acéptate ahora, o seguirás justificándote como un niño inmaduro e inconsciente de sus actos.

     Recuerda que cualquier momento es bueno para comenzar, y que ninguno es tan terrible para claudicar.

     Deja Ya de engañarte, eres la causa de Ti Mismo, de Tú necesidad, de Tú Fracaso. Si Tú haz sido el ignorante, el irresponsable: Tú, únicamente Tú. Nadie pudo haber sido como Tú.

     No olvides que la causa de Tú presente es Tú pasado, así como la causa de Tú futuro, es Tú presente.

     Aprende de los fuertes, los audaces, imita a los enérgicos, a los vencedores, a quienes no aceptan situaciones, a quienes vencieron a pesar de todo y de todos.

     Piensa menos en Tus problemas y más en Tú trabajo, en Tú Familia, en Tus amistades, y Tus problemas sin alimento morirán.

     Aprende a nacer desde el dolor y a ser más grande. Mírate en el espejo de Ti mismo. Comienza a ser sincero contigo mismo, reconociéndote por Tú valor, por Tú voluntad, y No por Tú debilidad para justificarte.

     Recuerda que dentro de Ti hay una fuerza que todo puede hacerlo; reconociéndote a Ti mismo más libre y fuerte dejarás de ser un Títere de las circunstancias, porque Tú mismo eres Tú destino.

     Levántate y mira y respira por las mañanas la Luz del amanecer. Tú eres parte de la Fuerza de la Vida. Ahora: Despierta, Camina, Lucha, Vive. Decídete y triunfarás en la Vida.

     No tengo ningún otro comentario que agregar, sólo esta sentencia final, que es parte del mismo escrito:

Nunca Pienses en la Suerte, porque la Suerte es el Pretexto de los Fracasados.

Ernesto E. Velásquez R.

Lechería, Anzoátegui. Venezuela.

06/01/2011

ernesto.e.velasquez@gmail.com